Si hay una carrera de motos míticas es la de la Isla de Man. Si te gustan las motos es imposible que no hayas tenido la tentación de lanzarte a abrir gas después de ver uno de los vídeos on-board de los pilotos durante la prueba.
La prueba se celebra en la Isla de Man, situada a medio camino en Irlanda y Gran Bretaña, y destaca por la velocidad. La primera carrera se celebró el 28 de mayo de 1907 sobre un circuito de 25,5 kilómetros y con un total de 10 vueltas. Su trazado es uno de los más rápidos y también de los más peligrosos y ostenta el honor de acoger en su momento la primera prueba del Mundial de motos el 12 de junio de 1949.
La Isla de Man destaca por sus espectaculares paisajes cubiertos de verde y también por una peculiaridad felina: el gato de Manx.
Esta raza de gatos es muy especial por una particularidad: no tiene cola. ¿Y cómo perdió su cola? Existen varias leyendas desde que Noé dejo caer la puerta del arca sobre la cola del animal hasta que un perro se la mordió, también en el arca o que las madres de los gatos cortaban las colas de sus hijos para evitar que el ejército invasor los cogiese para colgarlas en sus escudos. En el mundo motero todos sabemos la verdad, fue una moto la que le quitó la cola al gato de Manx.
El gato de Manx destaca por ser un animal compacto, con la cabeza redondeada y el pelaje corto, aunque también hay otra raza denominada Cymric, un pariente estadounidense, que sí tiene más pelaje. Estos felinos destacan por su inteligencia, sentido de la orientación y carácter. También son más afectuosos que la media y más ‘caseros. Otra de sus características es que su forma de correr recuerda al de un conejo, por lo que también surgió la creencia de que era fruto del cruce de ambas especies.
En la actualidad se diferencia entre varios tipos de gastos de Manx dependiendo de la forma de su “no cola”. Por un lado estarían los rumpy, que no tendría prominencia alguna, por otra los stumpy, que cuentan con una pequeñísima cola y por otra los riser, con colas de hasta tres vértebras, y los longy, con cola, pero mucho más pequeña que la normal para un gato.
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Imagen . Dan Lang en Flirck
