El viento no es un buen compañero de viaje. Cuando vas en moto y se levanta aire hay que extremar la precaución para no terminar en el suelo y llamando a tu seguro.
El viento es más peligroso para los moteros y te obligará a emplearte al máximo y realizar un esfuerzo extra. Dependiendo de tu modelo de moto estarás más o menos protegido contra el viendo y tendrás más o menos estabilidad. En una naked estarás a merced del aire, sin carenado que te proteja, y tendrás que realizar un esfuerzo mayor para mantenerte firme. El peso de la moto y tu propio peso corporal también jugarán un papel importante.
Cuando hay viento en la carrera el mejor consejo es extremar la precaución. Por fortuna, también hay algunas técnicas que te ayudarán a viajar más seguro:
- Reduce la velocidad. Cuanto más rápido circulas, mayor es el riesgo y el impacto de una posible ráfaga de viento. Además, ahorrarás combustible.
- Usa marchas más cortas. Esta es una forma de ganar potencia para poder reaccionar contra el viento. Circula por lo menos una marcha por debajo de lo que lo harías en un día sin viento y te asegurarás esa potencia extra que necesitarás para desplazarte contra el viento.
- Circular por el centro del carril. Esto te dará margen de maniobra para no invadir el carril contrario en caso de que llegue una ráfaga muy fuerte y repentina
No olvides estar atento a los signos que te ofrece la carretera para poder anticipar la potencia del viento y su dirección. Además de las señales de circulación, fíjate en la vegetación y sobre todo en las copas de los árboles, que te pueden dar mucha información sobre cómo sopla el aire.
Qué postura debes tener en cada momento
Cuando hay viento la postura en moto es la clave para no caerte y también para no terminar exhausto. Dependiendo de donde llegue el viento será necesario acomodarse de una u otra forma a tu máquina y al aire.
- Cuando viene de frente o de espalda deberás esconderte detrás de la cúpula, agachando el torso. Así ganarás aerodinámica y, sobre todo, evitarás que el viendo coche directamente contra tu cuerpo.
- Cuando viene de lado y tu moto lo permite, puedes aprovechar el carenado para resguardarte. Inclina ligeramente el cuerpo hacia el lado por donde llega el aire para equilibrar la masa del conjunto con la fuerza del impacto del aire. Así mantendrás tu estabilidad.
Además al rodar con viento, es importante agarrar el manillar con firmeza para que el tren delantero no se mueva por el aire y que seas tú quien lo controla. Olvida esta firmeza para el resto del cuerpo y sobre todo de cintura para abajo. Debes mantener las piernas flexibles y si el viento te golpea, dejar a la moto a su antojo, apretando después las piernas para volver a tomar el control de tu máquina.
Qué hacer si te caes
Si pese a todo tienes la mala suerte de irte al suelo, recuerda dejar que la moto vaya por un lado y tú por otro para evitar hacerte más daño. Una vez te levantes, comprueba tu estado físico y el de la moto y si fuese necesario llama a la asistencia médica y a tu seguro de moto.
Recuerda que tu seguro de moto sólo te cubrirá la asistencia médica si tienes contratada la garantía de accidentes del conductor. Un seguro básico a terceros sólo cubre los daños que puedas ocasionar a terceras personas, de forma que si te caes tú sólo la compañía no te indemnizara y tampoco estarás cubierto por la Seguridad Social. Es decir, si acudes a un hospital o tiene que ir la ambulancia, te atenderán normalmente, pero después tendrás que pagar el coste de la operación. Y es que la Seguridad Social no se hace cargo de los gastos por accidente de tráfico.
Desde motopoliza.com siempre recomendamos contratar un seguro con esta cobertura. La diferencia de precio no es excesiva y estarás mucho más cubierto. Calcula tu seguro y descubre cuál es la diferencia.
Para terminar recuerda que los siniestros expiran y que dispones de 7 días para comunicarnos la incidencia.
