El deporte de motor es muy exigente. Si te has subido alguna vez a una moto habrás podido comprobar que hace falta estar en forma simplemente para hacer un viaje largo. En circuito la cosa
Cuando uno empieza a aficionarse a los circuitos y empieza a rodar cada vez más deprisa, poco a poco nota que cada vez le cuesta más acabar el día sin estar destrozado. ¿Has pensado que eso se puede deber a tu mala alimentación? Los pilotos profesionales siguen una estricta dieta. ¿Por qué no haces tú lo mismo?
Si tu cuerpo tiene energía, serás capaz de aguantar un día entero y acabar como una flor. Si comes mal la semana antes de unas tandas, el día clave no rendirás al 100 %. Por eso en Todo Circuito contamos con un especialista que nos irá aconsejando sobre qué comer.
Correr en circuito exige un gran esfuerzo y una gran demanda de energía. Cuando vas ligero, te mueves como un peso encima de la moto y sudas lo indecible. Si no contamos con una buena alimentación, nuestro rendimiento baja enormemente, con los riesgos que ello conlleva para ti, y para tu montura. Un correcta alimentación no es cosa de 3 dias, pero, podemos diseñar un «plan de carga» de cara a optimizar nuestros resultados en la pista.
Los días previos
Durante los 3 dias previos a las tandas, podemos hacer una carga de glucógeno (el glucógeno es la forma almacenada de glucosa en nuestros cuerpos). Recordad que la célula humana sólo puede quemar glucosa en última instancia para obtener energía, por lo que todo lo que comemos ha de ser transformado en ella. Para ello, aumentaremos el consumo de hidratos de carbono de asimilación lenta (pasta poco cocida, fruta, arroces, pan…) y bajaremos el consumo de proteína (carnes, pescados, aves…). Con ello, conseguimos doblar las reservas de glucógeno en higado y músculos.
Estos alimentos son de gran importancia en la dieta de los deportistas ya que suponen el principal combustibleenergético de nuestro organismo. Han de ser los protagonistas de nuestra alimentación los tres días anteriores a unas tandas, para que podamos disponer de toda la energía que necesitaremos. Por tanto, la dieta podría estar compuesta por un desayuno en el que se incluya un zumo de fruta y unos cereales con yogur, un almuerzo a base de pan con queso, jamón, pavo o tortilla con algo de fruta, una comida compuesta por un primer plato rico en hidratos de carbono como pasta con tomate, arroz con verduras o legumbres con patata, junto a un segundo que aporte proteína como carne o pescado.
El postre puede ser un lácteo (yogur, queso, cuajada…) o una fruta, sin olvidar la ración de pan correspondiente a esta toma. Para merendar,se puede tomar algo de fruta acompañada de un lácteo y un poco de pan tostado, mientras que la cena estará compuesta por un primer y segundo plato similares a los de la comida del mediodía, una ración de pan y acabará también con un lácteo (también puede ser arroz con leche, postre rico en hidratos de carbono) o fruta fresca o en almíbar.
El día clave
El día de las tandas, procura hacer la última comida al menos, dos horas antes del comienzo de la prueba. Recuerda que no es día para hacer experimentos con alimentos nuevos, asÍ que, opta por tu desayuno de siempre, suprimiendo los alimentos que puedan producir una mala digestión (cremas, leche, nata, mantequilla…).
Lo mejor es que optes por mezclas como: tostadas con mermelada o jamón con tomate, fruta, incluso, si tu estómago te lo permite, un plato de pasta con tomate y carne. Además, procura beber pequeños tragos de agua durante toda la mañana, hasta la entrada en pista. ¡Ojo! Pequeños tragos de vez en cuando. No bebas como si te fuera la vida en ello, o te sentirás un botijo encima de la moto.
Durante las tandas, procura beber todo lo que puedas en los descansos. Si usas bebidas energéticas, es mejor que las mezcles con agua, o corres el riego de sufrir una subida de insulina que dejará tus fuerzas por los suelos (las bebidas energéticas contienen glucosa en estado puro que, al entrar en el torrente sanguíneo, producen una subida de insulina para evitar un posible exceso de azúcar en sangre). Al tomarlas diluidas, el azúcar se vaasimilando y convirtiéndose en glucógeno poco a poco.
Si las bebidas isotónicas te parecen muy caras, haz lo siguiente: mezcla, por cada litro de agua, el zumo de dos limones y una naranja, una pizca de sal, otra de bicarbonato sódico, un par de cucharadas de azucar (si además, compras colorante alimentario azul, y se lo echas, te quedarás con todo el pit lane jajaja). Cuando todo haya acabado, procura seguir bebiendo aunque no tengas sed. Ahora es el momento de tomar azúcares sencillos o «rápidos», como bebidas isotónicas sin diluir, miel, mermeladas, pan, pasta muy hecha, fruta madura… A las dos horas, más o menos, otra comida de hidratos complejos o lentos con algo de proteína.
Recordad que estas pautas estan dirigidas a pilotos «no-profesionales». He tenido la oportunidad de ver el plan deentrenamiento, alimentación y suplementación de alguno de ellos y, eso, ya es otra historia.